La situación es preocupante en el Centro Privativo de Libertad de Punta Arenas. Después de tanto discurso, de tanta promesa, de tanta campaña poniendo a los niños y niñas, y a la juventud como prioridad, lo cierto es que la verdad y la realidad es otra. Infraestructura en pésimas condiciones, innumerables solicitudes para arreglar los graves problemas que los aquejan, falta de baños, y de personal.
Si esto no es abandono por parte de quienes son los responsables, la verdad es que cuesta entender qué más podría ser.
En un comunicado de prensa, la Asociación de Trabajadores de SENAME ANTRASE se ha declarado en estado de alerta producto de más de diez años de espera a respuestas concretas en temas de ampliación del centro, lugar de traslado en caso de emergencia, dotación de funcionarios de trato directo, y activación de infraestructura en el centro.
«Queremos dar a conocer sobre la ampliación del centro que desde el 2007 que se nos ha ofrecido distinto tipo de proyecto de ampliación, sin concretarse ninguno hasta la fecha, necesitamos instalaciones para talleres urgente, además tallerista y aumento de presupuesto para tal, sistema femenino que cumpla los estándares de cálida necesario, mejoramientos necesario en la infraestructura del centro ( Baños, duchas, oficinas de educadores, cobertura de paso de administración hacia el interior del centro, entre otros), este proyecto hoy nuevamente esta postergado por nuestras autoridades nacionales del servicio.» dice en el inicio del escrito.
Al mismo tiempo, afirman que «hoy nos encontramos en una situación compleja en caso de algún tipo de emergencia que afecte a nuestro centro donde tengamos que trasladarnos por alguna emergencia mayor, como por ejemplo alerta de sunami a nivel nacional y/o emergencia interna. El lugar que tenía designado para esto, no lo podemos ocupar debido a que el Complejo Penitenciario, quienes nos facilitaba un sector para nuestros jóvenes, hoy no cuentan con los espacios necesarios para acogernos por problemática interna de Pandemia. Sumado a ello existe también falta de personal para completar la cantidad de funcionarios por turno, esto ha sido producto de renuncias, que no han sido reemplazadas por parte de la autoridad del servicio, donde lo que se ha logrado es tener solo funcionarios a honorarios, recibiendo un pago que no es acorde a las funciones que se deben cumplir como educadores de trato directo, faltándonos en la actualidad cinco funcionario a contrata o mínimo dos funcionarios más para cobertura total de turno diurno, siempre y cuando podamos conservar a los tres funcionario a honorario que tenemos, ya que son evaluados mes a mes.»
Cabe mencionar, que en materia de infraestructura, uno de los problemas que más les preocupa como funcionarios es el sistema eléctrico que ha presentado fallas en este tiempo, y respecto del cual se les ha señalado que existe un proyecto que fue entregado a la dirección nacional, pero al día de hoy no tiene asignado ningún presupuesto. Sin dejar de mencionar el problema del agua potable. Supuestamente, hoy no existe un proyecto para el cambio completo de las instalaciones del agua, lo que es preocupante porque si se presenta una nueva rotura mayor los propios funcionarios afirman que no tendrían cómo solucionarlo.
Una vergonzosa realidad, que sigue sin respuesta. Un escenario muy poco digno, y además donde las autoridades a cargo han brillado por la ausencia de entregar soluciones reales, concretas, o no simples soluciones que terminan agrandando cada vez más el grave problema por el que pasa hace años el Centro Privativo de Libertad de Punta Arenas.