Cerca de medio millar de días pasaron para que nuevamente se utilizara una pista de baile en Chile. Y el lugar escogido fue la discoteque «Club K» de Punta Arenas, la primera en abrir sus puertas luego del cierre obligado por la pandemia.
Media hora antes ya había cola para ingresar porque, además de que el aforo está limitado para sólo 200 bailarines, el recinto tiene permiso para funcionar entre las 19 horas y minutos antes del inicio del toque de queda, por lo que cada minuto es sagrado para los danzarines.
Y en el local se pudieron ver rostros muy alegres, mientras contorneaban los cuerpos al son de la música o al recibir las refrescantes piscolas de manos de los generosos barman.
Pero nadie estaba más contento que Pablo Maimai, administrador del local. Comentó que venían trabajando hace tiempo para tener todas las medidas sanitarias para otorgar seguridad a los parroquianos.
«Hay que partir de a poco para tener un funcionamiento adecuado en lo que se refiere a la pandemia», dijo Maimai, que ha entregado cuñas tanto a medios regionales como nacionales.
Eso sí, todas las personas deseen ir a bailar club nocturno deben contar obligatoriamente con pase de movilidad y portar mascarilla.
Y Maimai dijo que serán estrictos en hacer cumplir los protocolos.
«Muchos jóvenes no pudieron ingresar por no estar vacunados, y ahora se quieren vacunar», advirtió el administrador.
Uno que también estuvo presente en la disco, seguramente reporteando para ITV Patagonia, fue el periodista Cristian Tejo, quien publicó un breve video en twitter. Y los comentarios no se hicieron esperar.
“Una estupidez de gente sin cerebro que no puede esperar un tiempo más, esto era innecesario”, comentó Fabián (@zeus6313).
Algo más positivo fue Bastián Figueroa (@Bastian_crea), quien escribió felicitando a Magallanes: “Qué bueno que las personas de esa región tomen normalidad, también qué bueno por la gente totalmente olvidada de ese trabajo, djs, animadores, barman, técnicos, y si están los protocolos como el carnet verde. Bueno que los antivacunas sigan encerrados”.
Y otro que comentó la publicación fue el periodista Sebastián Esnaloa, quien al compartir reparó que la música que tocaban en ese instante corresponde a la misma de un famoso meme, en el que cuatro africanos cargan un féretro al ritmo del tecno.
“Ojalá la canción no sea una señal…”, manifestó el periodista en el tweet.
