Hay gente que no muere nunca.
Se volvieron leyenda los testimonios de quienes vieron con vida, en alguna playa desolada o en un bar de marineros, a Jim Morrison y Elvis Presley largo tiempo después de que habían sido enterrados.
Hay muchos otros ejemplos vinculados a criminales. Otras historias.
El último no muerto fue William Shakespeare. Si, el dramaturgo inglés fallecido por primera vez un 3 de mayo de 1616.
En su momento, no fue una partida en paz. De grande, William anduvo en cuestiones reñidas con la ley en lo referente a dineros de otros, hipotecas, deudas y acusaciones de índole sexual.
Tal fue un digno final de quien escribió “El Rey Lear”, “Macbeth”, “Tito Andrónico”, entre otros festivales de sangre, engaño y locura por el poder.
Hay que ser justos también escribió “Romeo y Julieta”, menos salpicada de salsa de tomate.
Dicho todo esto.
El 28 de mayo pasado murió William Shakespeare, de nuevo.
Y este tipo de cosas lo hacen a un pensar en cuanta razón tenían Nietzsche y Mircea Eliade con lo del “mito del eterno retorno”.
Este segundo Shakespeare era un abuelo de 81 años que alcanzó la fama por convertirse en el primer varón en recibir la vacuna Pfizer. William del condado de Warwickshire murió de otras causa, no de coronavirus.
Esta semana, una periodista argentina, confundiendo épocas, personas y actividades, enterró al primer William dejando en el aire al segundo.
La conductora de Canal 26, Noelia Novillo, sepultó a William Shakespeare pero aludiendo al William Shakespeare original. El dramaturgo.
Fue así:
“Y vamos con una información que realmente nos deja a todos con la boca abierta ante la magnitud de este hombre. Estamos hablando de William Shakespeare y su fallecimiento. Vamos a contar el motivo, el porqué», arrancó la periodista.
“Lo cierto es que uno de los escritores más importantes, para mí el más referente de la lengua inglesa, ahí lo vemos…”, agregó.
Detrás comenzaron a aparecer imágenes del abuelo que no tenía nada que ver con Shakespeare original.
La periodista hizo luego su descargo, pero no aclaró demasiado. Un lapsus. Un pasaje a la dimensión desconocida. Vaya uno a saber.
En Inglaterra, una concejal se despidió del verdadero Bill William.
“Me entristece mucho saber que nuestro amigo, el encantador Bill Shakespeare ha fallecido. Será recordado por muchas cosas…Se convirtió en una sensación internacional al ser el primer hombre en recibir una vacuna contra el Covid-19. Nuestro amor para su familia”, dijo Jayne Innes, concejala de Coventry y amiga del fallecido.