El Calafate es la primera localidad que implementa en la Argentina la “Estrategia Capullo”, un protocolo médico que permite resguardar los miembros más frágiles de cada familia.
La técnica procede de Chile donde existe amplia bibliografía y experiencia al respecto. El hospital SAMIC de la ciudad de Santa Cruz decidió utilizarla por primera vez en la provincia y su país como respuesta a un solicitud del grupo “Enfermedades Poco Frecuentes” (EPOF) compuesto por padres de chicos con diversas enfermedades discapacitantes. Se trata de personas que correrían grave riesgo vital de resultar contagiadas.
La “Estrategia Capullo” consiste en inmunizar al círculo íntimo de la persona más vulnerable hablando en términos de salud y estabilidad orgánica.
“Somos la primera localidad del país que incluye a este grupo de padres que no tienen ninguna patología, pero estamos al cuidado de nuestros hijos que tienen enfermedades crónicas, degenerativas y en la mayoría de los casos altamente discapacitantes”, dijo Florencia Agüero, vocera de EPOF a FM DIMENSION.
El miércoles pasado los adres de los chicos afectados se vacunaron en el SUM del hospital contra el Covid 19.
“En la estrategia capullo se incluye a familiares cercanos, adultos y niños, que conviven con el caso índice y otras personas que habitan en el mismo hogar. Esta estrategia es recomendada por el Departamento de Inmunizaciones en el documento “Recomendaciones para la vacunación de pacientes con necesidades especiales por patologías o situaciones de riesgo” del 2018. En general estas recomendaciones incluyen, además, al personal en atención directa de estos pacientes en los hospitales y hogares de acogida y escuelas para pacientes inmunocomprometidos: oncológicos, infección por VIH/SIDA, receptores de trasplantes de precursores hematopoyéticos y órganos sólidos”, indica un documento del departamento de Inmunizaciones/ División de Prevención y Control de Enfermedades de la Subsecretaría de Salud.
“Es una estrategia utilizada frecuentemente en este grupo de pacientes para prevenir infecciones como sarampión, varicela, influenza, entre otros, y en el contexto actual, de pandemia por SARS-CoV-2 parece una estrategia racional para proteger a los pacientes pediátricos inmunocomprometidos vacunando a sus cuidadores y contactos más cercanos mayores de 16 años”, agrega.
“La vacunación capullo de los pacientes inmunocomprometidos pediátricos es imprescindible para protegerlos de la transmisión viral”, advierte el escrito.
“Se sugiere indicar vacuna anti SARS-CoV-2 a un promedio de 4 personas que puede incluir, cuidadores y contactos familiares mayores de 16 años, con un máximo de 6 personas de forma excepcional”, detalla