El grupo de «hacktivistas» denominado como Guacamaya, sería el responsable de la filtración de alrededor de 10 terabytes de correos electrónicos de organizaciones policiales y militares de diferentes países en Centro y Sudamérica, entre los que se encuentra el hackeo de más de 400 mil correos electrónicos del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, con información relevante desde el año 2019 a mayo del presente año.
Según recopiló La Tercera, el grupo enmarcó esta serie de hackeos en una operación denominada «Fuerzas Represivas», sobre la cual señaló que «filtramos sistemas militares y policiales de México, Perú, Salvador, Chile, Colombia y entregamos esto a quienes legítimamente hagan lo que puedan con estas informaciones».
Además, de acuerdo a la descripción realizada por el sitio especializado en ciberseguridad, CyberScoop, el grupo, que se autodenomina Guacamaya, en honor a un tipo de ave nativa de América Central y del Sur, realiza sus hackeos a modo de activismo político y ambiental, centrándose en «infiltrarse en empresas mineras y petroleras, la policía y varias agencias reguladoras latinoamericanas».
Agregando que se enfrentan a «fuerzas represivas, violentas, criminales contra los propios pueblos y sus organigramas internos piramidales de poder».
Es debido a lo anterior, que según Guacamaya, se han filtrado datos del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Chile, Comando General de las Fuerzas Militares de Colombia, Policía Nacional Civil de El Salvador y Fuerzas Armadas de El Salvador, Secretaría de la Defensa Nacional de México, Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas de Perú y el Ejército de Perú, a modo de «venganza» por el rol que han tomado estas entidades «en la represión de la población indígena y la degradación ambiental en la región».
«Para que quede claro, los Ejércitos militares y las fuerzas policiales de los Estados de Abya Yala – el nombre indígena original de la región entre el norte de Colombia y Panamá- son la garantía de la dominación del imperialismo norteamericano, son la garantía de la presencia extractivista del Norte Global«, aseguró el grupo Guacamaya en un comunicado publicado por La Tercera.
El pasado agosto, Guacamaya publicó más de 2 terabytes de correos electrónicos y archivos pirateados de una gran cantidad de empresas mineras en América Central y del Sur, en un movimiento aparentemente para exponer el daño ambiental en la región.
