«Un saludo grande al pueblo de Chile, desde el norte hasta la Patagonia, desde el mar hasta la cordillera, en las islas, a todo el pueblo de Chile que nos está escuchando. Aquí estamos, agradecerle el apoyo a las diferentes coaliciones que entregaron su confianza y depositaron sus sueños en el llamado que hiciera la Nación Mapuche, para votar por una persona mapuche, mujer, para cambiar la historia de este país. Este saludo y agradecimiento es también para la diversidad sexual; este saludo es para las mujeres que caminaron en contra de todo sistema de dominación, agradecerle que esta vez estamos instalando aquí una manera de ser plural, una manera de ser democráticos y ser participativos”. Palabras de la recién electa presidenta de la Convención Constituyente, Elisa Loncón Antileo. Primero en mapudungún y luego en castellano. Un momento emotivo, para recordar y reflexionar. Una mujer, una mapuche, una representante de los pueblos originarios. Así se llegaba a uno de los momentos más esperados del día.
Y prosiguió diciendo: “Por eso, esta Convención que hoy me toca presidir transformará Chile en un Chile plurinacional; en un Chile intercultural; en un Chile que no atente contra los derechos de las mujeres, el derecho de las cuidadoras; en un Chile que cuide la madre tierra y que también limpie las aguas. Este sueño es un sueño de nuestros antepasados, este sueño se hace realidad, es posible refundar este Chile, establecer una nueva relación entre el pueblo mapuche, las naciones originarias y todas la naciones que conforman este país. Esta es la primera muestra de que esta Convención va a ser participativa. Nosotros como pueblo originario establecimos de que iba a ser una dirección rotativa, colectiva que de espacio a todos los sectores que están representados aquí”.
Alta expectación desde temprano
Alto interés había en todo el país durante la mañana de este domingo. El centro de atención estaba enfocado en el Palacio Pereira, ubicado en el centro de Santiago, donde comenzaba a sesionar la Convención Constituyente.
Y poco a poco, los asambleístas comenzaron a llegar a los alrededores del palacio. Los primeros en arribar a la sede del Congreso en Santiago fueron los convencionales de Chile Vamos, entre los que se encontraba el magallánico Rodrigo Álvarez. Algunos de ellos, como Teresa Marinovic y Arturo Zúñiga, llegaron portando una bandera chilena. Eran cerca de las 11.00 horas de Magallanes (10.00 del resto del país) y ya faltaban minutos para el inicio de la ceremonia.
Mientras tanto, los integrantes de la Lista del Pueblo desarrollaban su recorrido desde Plaza Italia hacia Plaza de Armas. Y otros grupos también buscaban destacar simbolismos: Los mapuches se reunieron en el Cerro Huelén (Santa Lucía), donde realizaron una ceremonia privada, y socialistas en el monumento de Salvador Allende, en la esquina de Morandé con Moneda, en la Plaza de la Constitución.
Uno de los que se vio bastante aislado durante la jornada fue Fuad Chahín, el único democratacristiano electo para participar en la constituyente. Llegó portando un “hattah”, el pañuelo característico palestino, en homenajes a sus ancestros.
La hora de incidentes
Y finalmente, la sesión inaugural no se inició a la hora programada, ya que muchos convencionales no llegaban aún al lugar. Además, ya se registraban incidentes. En Ahumada con Alameda, un grupo botó rejas y atacó a Carabineros.
Estos se intensificaron en el sector de Bandera con Compañía, cuando se derribaron vallas. La fuerza pública dispersó a los manifestantes y se registraban enfrentamientos en Plaza de Armas.
Ello provocó cierto nerviosismo entre muchos constituyentes, quienes a gritos de “no a la represión” solicitaban que no comenzar la ceremonia. Al iniciar el Himno Nacional, muchos de los convencionales gritaban por la libertad de los presos del estallido social.
Carmen Gloria Valladares, la abogada del Tricel encargada de dirigir la primera sesión de la Convención Constitucional, intentaba de encauzar la jornada mientras Elsa Labraña, de la Lista del Pueblo, le enrostraba la “represión” que había en paralelo en los alrededores. Ante la situación, otros electos se acercaban a la mesa para mediar y así proseguir con la jornada.
Valladares finalmente accedió y decidió postergar el inicio para las 13.00 horas de Magallanes “para asegurarnos que el país esté tranquilo y podamos tener la audiencia solemne como corresponde a estas autoridades y al país», ante los rumores de heridos y detenidos.
Al mismo tiempo, Carabineros informaba de un funcionario herido y que no habían detenidos por los incidentes.
Los constituyentes van a las manifestaciones
Mientras tanto, varios convencionales aprovecharon el tiempo para dialogar en los jardines del Congreso, para conocerse y coordinar la elección de la mesa directiva.
Grandón, junto a Rodrigo Rojas, Manuel Woldarsky y Valentina Miranda se dirigieron a Plaza de Armas para intervenir en el enfrentamiento entre manifestantes y Carabineros. Miranda acusó que fue atacada por las fuerzas de orden: “Junto a más constituyentes decidimos no dejar pasar los carros de Carabineros para reprimir a nuestros pueblos en Plaza de Armas. ¡Ahora nos están golpeando y me acaban de romper el labio!”, denunció en su cuenta de Twitter.
A su vez, los convencionales de Chile Vamos permanecían en el Congreso de Santiago a la espera de la ranudación, manifestando que se quedarían en el lugar sin importar la hora para reanudar la sesión. Teresa Marinovic decía que permanecerían “una semana si es necesario”, mientras Constanza Hube comentaba que “si no se sesiona, se tiene que dictar un nuevo decreto”.
Se reanuda la sesión
Finalmente, Carmen Gloria Valladares informó cerca de las 13.30 horas de Magallanes que «los convencionales constituyentes que fueron al lugar de los acontecimientos que han provocado esta suspensión de la audiencia ya están haciendo ingreso al edificio, llegaron a acuerdo en el sentido de que no hay represión, no hay detenidos, no hay lesionados; en consecuencia, en cinco minutos damos inicio a la solemne audiencia».
Casi tres horas después de lo programado, se reanudó la ceremonia con la lectura de nómina de los convencionales, mientras algunos de ellos recién volvían al lugar.
Estando finalmente todos presentes (menos Felipe Harboe, que por cuarentena preventiva presenció la ceremonia desde su domicilio), Valladares consultó a los presentes si aceptaban el cargo, lo que fue respondido afirmativamente por todos los presentes.
«Han dejado de ser convencionales constituyentes electos, ahora son convencionales constituyentes», declaró la abogada, quedando instalada la convención.
Luego se realizó la elección de la mesa directiva, que finalmente quedó presidida por la representante del pueblo mapuche, Elisa Loncón. Asumió sus labores inmediatamente, y dirigió la elección de la vicepresidencia, que recayó en el miembro del Frente Amplio, Jaime Bassa.
La próxima sesión de la Convención Constitucional quedó fijada para este lunes a partir de las 16 horas de Magallanes.
