Los precios al consumidor en Argentina mantienen su acelerada carrera, situándose en agosto en el 78,5 por ciento interanual, la mayor tasa registrada en 30 años, y encaminándose a acumular este año un alza del 100 por ciento.
Según informó este miércoles el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), el índice de inflación fue en agosto del 7 por ciento en comparación con julio último, evidenciando una mínima desaceleración con respecto a la tasa del 7,4 por ciento que se había registrado en el séptimo mes del año, y que supuso el mayor salto mensual desde abril de 2002.
De acuerdo a Lautaro Moschet, economista de la Fundación Libertad y Progreso, «el dato de agosto, aunque siga siendo inusualmente alto, anuló las sospechas de espiral inflacionaria y, por lo tanto, la dinámica exponencial«.
«No obstante, está claro que entramos en un régimen de inflación un escalón más alto del que veníamos», observó.
En términos interanuales, los precios al consumidor se dispararon en agosto al 78,5 por ciento interanual, lo que representa un avance de 7,5 puntos porcentuales con respecto a la variación registrada en julio último.
Esta magnitud de alza interanual es la más alta desde diciembre de 1991, cuando Argentina intentaba dejar atrás la hiperinflación de 1989-1990.
Según el informe del Indec, en los primeros ocho meses del año Argentina acumuló una inflación del 56,4 por ciento, la mayor tasa para los primeros ocho meses del año desde 1991, año en que Argentina terminó con una inflación del 84 por ciento.