Se dirá hasta el cansancio que las comparaciones siempre resultan odiosas.
Aún así sirven y poseen una lógica abrumadora.
Estableciendo comparaciones es que podemos medir el verdadero tamaño de nuestros zapatos, por decirlo de algún modo.
El sur del continente nos permite un ejercicio de comparación privilegiado. Uno que ya habrían añorado hacer hoy mismo historiadores neo marxistas como Milciades Peña quien en su libro “Historia del Pueblo Argentino” estableció parámetros entre el desarrollo de ciertas áreas complejas geográficamente hablando de los Estados Unidos con la Argentina y su inmensa pampa húmeda. Ya sabemos cómo siguió este relato verídico.
De un lado de la Cordillera, Chile, del otro la Argentina. En este rincón del pacífico Magallanes (extremo sur de Chile, abrazada al Estrecho de Magallanes) y en este otro, Tierra del Fuego, provincia argentina.
La Región de Magallanes y de la Antártica Chilena en su totalidad está compuesta por las provincias Antártica chilena, Magallanes, Tierra del Fuego y Última Esperanza. Las principales ciudades del sur-sur transandino son Punta Arenas y Puerto Natales.
En definitiva, se trata de dos regiones patagónicas gobernadas de maneras muy distintas que han llegado a esta instancia del siglo XXI con diferencias sustanciales y hasta escandalosas en cuanto al desarrollo económico y social.
Colocando las cosas blanco sobre negro. La discusión política que enfrenta Magallanes en esta época no es pagar créditos internacionales en dólares o recibir subvenciones estatales o desaparecer sino cómo acelerar su conversión en la primera región totalmente desarrollada del país.
Para algunas voces sectoriales esto podría ocurrir antes de una década. El horizonte claramente no es Venezuela sino Noruega o Suecia incluso.
Pongamos algunos datos sobre la mesa. Tierra del Fuego tiene un PBI estimado en unos U$S 7.731 millones. Contra alrededor de USD 3000 de Magallanes.
Utilizando este dato como punto de partida uno podría presuponer (mal) que la riqueza estaría del lado argentino.
Lo cierto es que con poblaciones muy similares (unas 180 mil personas cada una) en Tierra del Fuego la estadística oficial revela que la provincia tiene alrededor de 50 mil pobres y una tasa de desempleo que ronda el 8%. En tanto que Magallanes tiene unos 9800 pobres y una tasa desempleo del 6,5%, según el último informe del Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Es decir, que aunque el PBI provincial casi duplica al de la región de Magallanes hay en TdF 5 veces más pobres y 1,5% más de desempleo.