El municipio de Puerto Natales envió a la redacción de Zona Zero un documento donde se refleja la posición de la alcaldesa Antonieta Oyarzo y su equipo acerca del frustrado y millonario proyecto de ampliación del muelle de la localidad.
El texto lleva por título “Mejoramiento Capacidad de Atraque Terminal Marítimo de Puerto Natales” y está dirigido a Sr. José Luis Riffo Fidelli, director regional del Servicio de Evaluación Ambiental de la Región de Magallanes y Antártica Chilena.
A lo largo de 20 páginas de contenido, la alcaldesa y su equipo apuntan contra la iniciativa de ampliar la capacidad del actual muelle de EPA a través de una serie de consideraciones de corte ambiental.
Básicamente lo que asegura la autoridad municipal es que la ampliación afectará el medioambiente, la circulación en la zona de la Costanera y la calidad de vida de los vecinos de las cercanías.
Todo esto sin fundamentarse en un estudio concreto realizado por una agencia especializada. En la mayoría de sus conceptos se observan apreciaciones, puntos de vista y visiones, pero ningún argumento técnico de peso. No hay mediciones, cálculos matemático ni fórmulas tiempo/espacio/sonido habituales en este tipo de análisis.
Si un municipio va a rechazar un proyecto de 3 millones de dólares se desprende que harán un profundo relevamiento técnico. No es el caso.
Extrañamente en uno de sus párrafos indica: “NO QUEDA CLARO, CÓMO EL PROYECTO SE RELACIONA CON LOS EJES DE DESARROLLO COMUNALES” (las mayúsculas son las del texto original).
A lo menos se trata de una afirmación temeraria.
Hagamos un poco de historia: Puerto Natales nació hace 111 años como un puerto y con proyección de puerto. Bajo esta base es que se integró el Frigorífico Bories y la actividad ferviente de la Sociedad Explotadora. Se le sumó una clara vocación por la industria pesquera artesanal –a pocos metros del proyecto se emplaza el Terminal Pesquero de los pescadores artesanales– e industrial.
El turismo encaja como una pieza precisa dentro de este esquema con la llegada de barcos turísticos, de carga, pero con comodidades para visitantes (Navimag, por caso) y la salida de embarcaciones hacia los glaciares Serrano y Balmaceda, Canal de las Montañas, estancias en la zona de enfrente de la ciudad, entre otros.
De este modo, suena extraño y hasta escasamente profesional, responder a la autoridad pertinente que “NO QUEDA CLARO, CÓMO EL PROYECTO SE RELACIONA CON LOS EJES DE DESARROLLO COMUNALES”.
El documento alude al aumento del tráfico vehicular en un sector cruzado por una extensa avenida que fue pensada para esto. Por lo demás, las posibles alteraciones en el ruido ambiental que se mencionan, ocurrirían también en un sector enclavado junto al mar donde hay escasas construcciones edilicias.
El documento hace un largo desvío por temas ambientales referidos a Torres del Paine que no se vinculan de modo explícito con el desarrollo industrial que implicaría el muelle.
Las afirmaciones de la alcadesa en este sentido parecen indicar claramente que debería resignarse el desarrollo futuro de la localidad al mantenimiento pristino, intocable, de toda la zona, un discurso que se iguala al de Greenpeace y otras organizaciones verdes aun más radicalizadas. Un pensamiento, que por lo demás, no coincide en nada con el de los fundadores de Puerto Natales que imaginaban una zona de amplia base productiva: campo, mar, industria y turimos.
Hay una pregunta que comienza a crecer en Puerto Natales a un año de la llegada de Oyarzo al poder. ¿Votó Puerto Natales por una figura política verde a ultranza? Todo indica que no, pero ahora la alcaldesa ha profundizado este rasgo de su administración. Un hecho preocupante que iría en contradicción con las ideas de crecimiento del propio gobernador Jorge Flies.
En un diálogo con periodistas de Zona Zero la alcaldesa Oyarzo negó rotundamente que ella hubiera bajado el pulgar a la tercera etapa del Polideportivo Municipal consistente en una cancha de tenis profesional techada.
Este medio ratifica su información basándose en fuentes directas del municipio.
La alcaldesa optó por priorizar otras iniciativas dejando en el aire la posibilidad de ampliar el Polideportivo Municipal, considerado uno de los mejor estructurados y diseñados de todo Chile.
En definitiva, es su prerrogativa rechazar la tercera etapa, aunque el Concejo Municipal y los vecinos no fueron consultados al respecto.
La alcaldesa opinó en su momento, tal indican nuestras fuentes, que el tenis no era importante para Natales puesto que se trataba de una actividad para clases económicas acomodadas.