El municipio de Natales es el último en Chile en resistirse a firmar el decreto que constituye la Comisión Técnica local, exigida por el gobierno, en el marco del Nuevo Sistema de Educación Pública que pretende implementarse en todo el país.
La decisión tomada por la alcaldesa Antonieta Oyarzo tiene un componente técnico y uno simbólico. En el aspecto nominal implica que no se acopla a los requerimientos burocráticos destinados a iniciar el proceso de los llamados Servicios Locales de Educación Pública (SLEP). Pero, más allá de este aspecto, implica establecer un límite y una barrera a una transformación que, en la visión de la Alcaldía Ciudadana, afecta los derechos esenciales de los profesores y las arcas de la comuna.
El traspaso de la educación municipal hacia un modelo descentralizado ha sido una vocación largamente expresada por el gremio docente. No obstante, el Sistema de Educación Pública que promulgó en 2017 la Ley 21.040, mediante el cual se crean 70 servicios locales sustituyendo la intervención de 346 municipios, no representa el propósito original de esta transformación.
No firmar el decreto es también un acto cargado de profundo simbolismo que demuestra la voluntad de un líder comunal y del cuerpo docente local de no adherir, a pesar de las fuertes presiones en las últimas semanas devenidas desde el gobierno central en Santiago, a un sistema con el que no concuerdan y rechazan.
“Los SLEP no encarnan el espíritu de la desmunicipalización. Al llegar a la alcaldía tuve que tomar una decisión y lo hice. Aun a riesgo de ser destituida”, señaló la alcaldesa Oyarzo.
En un escenario complejo y cargado poderosos intereses de orden gubernamental, Oyarzo se negó a firmar el decreto que significa, en definitiva, avanzar hacia la constitución del SLEP. El plazo final para la firma venció el 31 de agosto.
La máxima autoridad comunal ha informado ya al Concejo Municipal que los SPLEP mantienen un visión centralista de la educación, complejizan los procesos de enseñanza y las situaciones operativas que quedan en manos de organismos externos a los colegios. Además transfieren por completo las deudas del área de educación al municipio una vez que el Estado se haga cargo de ellas en el eventual traspaso del actual sistema municipal al SLEP.
“El Colegio de Profesores de Natales agradece y respalda absolutamente la gestión que hizo la alcaldesa Antonieta Oyarzo en el sentido de no firmar el decreto alcaldicio, lo cual amarra absolutamente a la comuna a ser parte del traspaso a ese nuevo sistema. Valoramos esa decisión lo que nos da un poco de tiempo para poder esperar ya sea una postergación de los servicios locales de educación o la esperanza que tenemos todos que con la nueva Constitución que emane con la Asamblea Constituyente. La nueva administración, que habrá en nuestro país a partir de marzo próximo, nos abre la posibilidad de modificar esa ley o lo que es mejor derogarla y establecer una nueva ley de educación que realmente nos entregue solidez y estabilidad a los profesionales de la educación”, indicó el presidente del Colegio de Profesores de Puerto Natales, Luis Altamirano.
También el presidente del Sindicato de Trabajadores de la Corporación Municipal de Punta Arenas, Ricardo Oyarzo, manifestó su apoyo a la máxima autoridad comunal.
“La alcaldesa Oyarzo se convierte en un símbolo al oponerse a esta masacre de la educación que propone el gobierno. Es una destrucción de la educación pública que viene de los 80 y termina con esto. Se crea un servicio híbrido entre lo estatal y lo privado que implica reducciones, falta de pagos en mantenimientos, traspaso de deuda, en definitiva, la jibarización del sistema educativo. Ella ha sido una de la pocas que se han opuesto y queda expuesta porque no es una ilusión que puede ser denunciada, pero aun así se mantiene firme”, aseguró Oyarzo.
“Natales es una de las pocas comunas de Chile que ha dado la batalla y se ha opuesto formalmente a la instalación de los SLEP. Esta gestión municipal llegó hasta las últimas consecuencias para defender la educación pública. No podemos permitir el traspaso a los servicios locales mientras estamos escribiendo una nueva constitución, que nos dirá cómo va a ser la educación pública que realmente queremos los chilenos. La ley 21040 es absolutamente centralista y no responde a la mirada territorial de nuestro país. No ve la realidad geográfica, no entiende que en nuestra comuna tengamos una escuela a 30 horas de distancia en barco en Puerto Edén, una escuela en Dorotea y una en Seno Obstrucción, que en esta ley serían administradas desde Punta Arenas”, indicó por su lado la secretaria general subrogante de la Cormunat, Ximena Velázquez.