A través de un comunicado de prensa de la unidad de comunicaciones de la jurisdicción Punta Arenas del Poder Judicial, confirmó que el magistrado Pablo Miño Barrera, fiscal judicial de la Corte de Apelaciones de la ciudad, fue una de las 120 personas controladas durante el operativo Carabineros-Senda el día viernes 13 de agosto, y donde marcó alcohol en la sangre, lo que configura la falta de conducir bajo la influencia del alcohol.
»En el examen de intoxilyzer (prueba de soplido) marcó una dosificación de alcohol en la sangre que, de acuerdo a la Ley de Tránsito, podría configurar la falta de conducción bajo la influencia del alcohol, figura que no constituiría delito, lo que debe ser confirmado o descartado por el resultado de la alcoholemia», dice el comunicado.
Al mismo tiempo, señalan que »el magistrado Miño se sometió voluntariamente a la alcoholemia, sin que en ningún momento requiriera de algún trato especial en razón del cargo que sirve en el Poder Judicial. Como establece la ley mencionada, está a la espera del curso de la investigación que ha de efectuar el Ministerio Público, una vez que Carabineros envíe a dicha institución el parte formal de lo ocurrido», finalizan.