Se estaba trabajando hace rato en estas posibilidad. Y finalmente desembocó en una propuesta basada en tres ejes: seguridad, estabilidad y empatía; donde se destaca la necesidad de una comunicación efectiva, avanzar a una nueva presencialidad que incluya la modalidad remota, tener medidas sanitarias y de transportes, además de asegurar con recursos a las comunidades educativas.
El ministro de Educación, Raúl Figueroa, en compañía de la subsecretaria de Salud, Paula Daza, y el ministro vocero de Gobierno, Jaime Bellolio, dieron cuenta de las principales conclusiones de las jornadas de escuchas a las comunidades educativas, lo que se traducirá en los próximos cambios en el Plan Paso A Paso. Aunque esos cambios en el plan lo cierto es que también se han avisado por parte del ministro Paris hace días y nada ha pasado.
Según Paula Daza «todos los expositores mostraron preocupación por las brechas de aprendizaje, de desarrollo socioemocional, del desarrollo cognitivo y, en general, de los niños en estos dos años de escolaridad en este contexto tan difícil de pandemia. Analizaremos todas estas medidas, todas estas sugerencias para poder generar un Plan Paso A Paso en donde los niños estén primero, porque su aprendizaje y la contención que le da la comunidad escolar es primordial para su desarrollo», agregó la autoridad sanitaria.
En la convocatoria se reunieron 151 personas, representantes de más de 120 organizaciones de la sociedad civil, apoderados, directores de establecimientos, sostenedores, alcaldes y profesores, quienes manifestaron a las autoridades sus distintas visiones, inquietudes y sugerencias respecto del retorno presencial a clases. En un trabajo conjunto de las carteras de Educación, Salud y el laboratorio de Gobierno de la Segpres, dichas propuestas fueron sistematizadas y según dijeron servirán como insumo para las modificaciones al plan Paso a paso, que se darían a conocer la próxima semana.