Adriana Aguilar Lagos, Gerente de la Cámara de Turismo Última Esperanza (CTUE), evalúa que el mes de septiembre ha registrado harto movimiento turístico en la zona, aunque aún no se ha normalizado la actualidad.
“Ha sido un mes en que la gente de Magallanes, y de otras zonas del país, ha tenido un cierto poder adquisitivo, porque hay liquidez”.
Se espera que al final de este mes haya otra actividad deportiva que ayude a reactivar el turismo en la provincia, ya que se espera que lleguen 1.500 personas a participar junto a sus acompañantes.
“Es necesario que se organicen eventos, congresos, seminarios, competencias deportivas. Es súper positivo para la región. Yo creo que de estos eventos no se está beneficiando solamente al Parque Nacional Torres del Paine, sino que también a Punta Arenas, y también se activa el transporte, ya que más gente viaja, más gente sale a comer. Tenemos una región en vías de la reactivación con el Turismo Nacional, que es el único mercado que hoy tenemos disponible”.
Aguilar sostiene que, pese a que no tiene las cifras a mano, septiembre ha sido el mejor mes para la actividad turística en los últimos dos años.
“Seguimos los gremios turísticos trabajando arduamente para que se abra, aunque sea un poquito, flexibilizar las medidas para ingresar a la región y solicitarle a las autoridades en forma urgente que puedan ver un plan de apertura de fronteras seguras, con foco en la actividad”.
Sin embargo, la gerente afirma que no desean descuidar el escenario positivo en el aspecto sanitario que presenta hoy la región, pero si se analiza la situación en todo Sudamérica, Chile es el único país que tiene restricciones o barreras sanitarias dentro de su propio territorio.
“Nos gustaría ir avanzando a la normalidad de a poco”.
En específico, Aguilar desearía que se elimine la cuarentena a las personas que ingresen al país con el esquema de vacunación completo y los exámenes PCR correspondientes, ya que ello sería suficiente.
“De verdad que guardar cuarentena para ingresar al país ha sido una piedra de tope y no se entiende porqué hay flexibilidades para altos cargos, para competidores de alto rendimiento. Hay flexibilidades por ahí que podrían adecuarse un poco”.
