A pocos días de cerrarse las inscripciones para las elecciones de diputados y diputadas, lo cierto es que se podría proyectar un escenario que no debería alejarse mucho de la realidad. El apoyo a cada uno de los sectores, tanto de izquierda, de derecha, incluido el “bianchismo”, hacen prever que las cosas podrían seguir en la misma línea.

Más allá de voces lejanas y más extremistas, la verdad es que Carlos Bianchi aparece con la primera opción de tener un resultado positivo y conseguir su reelección a la Cámara Baja. El diputado ha continuado con su línea independiente, aunque los partidos políticos de todos los colores y tendencias intentaron por diversos medios convencerlo para que fuera parte de alguna de sus listas. Finalmente, Bianchi seguirá en su independencia, cuestión no menor a esta altura, y potenciará los mismos conceptos que lo llevaron por primera vez al Parlamento, y de la misma manera en que ha logrado sus reelecciones. Lo cierto es que la representación más magallánica en términos de identidad se puede encontrar en el discurso y las acciones de Bianchi, lo que claramente le da una ventaja comparativa importante con miras a los escrutinios de noviembre.

Por el lado de Chile Vamos la cosa no es tan compleja, aunque hace un tiempo se veía algo más difícil el obtener buenos resultados. El actual diputado Christian Matheson liderará la lista parlamentaria. Se han sostenido conversaciones con Jennifer Rojas (ex intendenta y delegada de Piñera, pero que ha estado fuera de la política más pública hace demasiado tiempo), y también podría aparecer nuevamente el nombre de Juan José Srdanovic (Arcos).

El que está prácticamente confirmado en reemplazo de su pareja (Daniela Arecheta) es el actual presidente de Evópoli, Ricardo Hernández.

Con estos nombres, y usando tan solo un poco de lógica política, más los pocos sondeos de opinión pública, la verdad es que la lista debería rondar poco más del 20% del padrón electoral y sacar un representante gracias a la sumatoria de los cuatro nombres. En este caso, es improbable que Matheson obtenga menos votos que sus compañeros de lista, lo que le daría la reelección.

A su vez, en la izquierda, la diputada Javiera Morales correría con ventaja frente a sus compañeros o compañeras de lista. Fuentes del Frente Amplio y de otros partidos del oficialismo han confirmado que el FA está pidiendo dos cupos en el pacto, lo que prácticamente les aseguraría el cupo diputacional, y la reelección de Morales.

En esa línea, algunos mencionaron el nombre del actual delegado presidencial José Ruiz como acompañante en la lista, pero por Ley el actual representante del Gobierno de Gabriel Boric en Magallanes ya no renunció y ese nombre como opción no es real.

Otros sí, como el del seremi de Vivienda y Urbanismo, Marco Uribe, que renunciaría en los próximos días si es que se termina de cuajar el deseo frenteamplista de hacer un subpacto en la lista.

El PS tiene tres nombres para integrar la lista (Pablo Bussenius, Christian Gallardo y Juan Marco Henríquez), pero ninguno de los tres tendría los votos necesarios para hacerle sombra a una diputada en ejercicio. Por su parte, sería bastante ilógico que el Partido Comunista no llevara un candidato o candidata de sus filas teniendo a Jeannette Jara como candidata presidencial (PC), lo que va achicando los espacios a llenar.

El Partido Radical a nivel local estaría pensando en Verónica Aguilar, pero la perdedora en las últimas municipales podría quedar fuera si el armado de la lista es como explicamos anteriormente. Y esa decisión se tomará en la capital, sobre la mesa donde se están negociando los acuerdos. En todo caso, si el FA logra llevar un subpacto, las cartas están echadas y la reelección de Javiera Morales podría ser una realidad. Sobretodo, entendiendo que dicha lista también debería bordear el 25%.

Por su parte, la lista de Republicanos, Social Cristianos y Nacional Libertarios, tiene al ex consejero regional y ex candidato a la Gobernación Regional, Alejandro Riquelme, encabezando el grupo. Su votación en la anterior elección lo hicieron tomar la determinación de buscar un cupo en la Cámara. Pero ya sabemos de sobra que los votos de una elección no se guardan en el bolsillo y menos son de propiedad individual. A lo que además, hay que sumar el poco conocimiento ciudadano de sus acompañantes: Javiera Calvo (que ya fue candidata con escaso apoyo en las municipales), y Sabrina Garay.

De todas maneras, tendrían que buscar un cuarto nombre con el fin de sumar más votos y ver si pueden pelear un cupo, que así como se está conformando el escenario se ve difícil de conseguir. Hasta hace unos meses el nombre de Riquelme se veía con cierta posibilidad, pero el sistema electoral podría desfavorecerlo, y la sumatoria de otras listas dejaría a ese sector sin representación.

También existen otros nombres como el de Claudia Barrientos (ex PPD y ex seremi de Desarrollo Social de Michelle Bachelet), que ya tendría las firmas para presentarse como independiente. Lo cierto es que hace algunos días surgió la posibilidad de ser la representante del PS, pero en la interna regional finalmente se negó dicha posibilidad. Aunque algunos mencionan que todavía existe la opción que (para variar) se podría tomar desde el nivel central.

Aún falta para las elecciones… Pero las inscripciones están a la vuelta de la esquina. Y pareciera que el cierre de listas, como siempre podría traer algunas sorpresas. En todo caso, así como están las cosas, por el momento se ve una opción real de que los actuales parlamentarios por Magallanes puedan ser reelectos en noviembre.