La inentendible continuidad de la Cormag: Más de $3.600 millones sin ejecutar y las críticas por su falta de resultados
Es cierto, la Corporación de Magallanes prácticamente solo ha gastado en sueldos, mientras el gobernador Flies culpa a la rigidez del sistema público. Ya hay presiones con el fin de evaluar la continuidad de una entidad de la que poco y nada se sabe de forma concreta o respecto de sus logros, que en realidad han sido casi nulos.
Así las cosas, la realidad es más cruda de lo que se podría imaginar. La Cormag atraviesa su momento más crítico desde su creación. A tres años de su puesta en marcha, y pese a contar con un presupuesto superior a los $3.687 millones para el presente año, la entidad apenas ha logrado ejecutar una fracción mínima de esos recursos, lo que ha desatado una ola de cuestionamientos en el Consejo Regional, por parte de la sociedad civil, y de variados protagonistas de la escena local. Es que realmente, aún no se entiende su funcionamiento, y menos se logra comprobar el real aporte que ha significado su resurrección.
Durante la última sesión del Core, desde distintos sectores coincidieron en que los resultados son “paupérrimos” y que la corporación “no ha sido capaz de concretar ni un solo proyecto relevante”. Más del 90% de los fondos asignados debieron ser traspasados recientemente al Ministerio de Vivienda, ante la imposibilidad de ejecutarlos en los plazos previstos.
“La única plata que ha ejecutado la Cormag es la de los sueldos de los funcionarios, nada más”, afirmó con dureza la consejera Roxana Gallardo, quien además sostuvo que la comunidad “ya perdió la paciencia” frente a una institución que, según dijo, “no ha generado impacto alguno”.
Cabe señalar, que como gerenta general, Yenny Oyarzo recibe un sueldo bruto de $4.034.692. Ella es licenciada en Administración de Empresas de la Universidad de Magallanes. Al mismo tiempo, la corporación cuenta con tres ejecutivos de proyectos que reciben una renta bruta mensual de $2.073.537, según información publicada en el portal de Transparencia. Dentro de los ejecutivos de proyecto se encuentran Alejandro Parada, arquitecto de la Universidad de Magallanes; Paulina Trujillo, socióloga de la Universidad Andrés Bello y la bióloga marina Paulina Barraza. Los cuatro se encuentran bajo la modalidad del Código del Trabajo. Por otro lado, Cormag contrató durante algunos meses del 2024 distintos servicios profesionales a honorarios.
Por su parte, el gobernador regional, Jorge Flies, ha salido tenuemente al paso de las críticas asegurando que las dificultades no son responsabilidad directa de la administración, sino del modelo de gestión impuesto desde el nivel central. “El problema está en la estructura de asignación presupuestaria para programas y corporaciones. Los trámites, autorizaciones y exigencias hacen imposible ejecutar en tiempo y forma”, explicó.
Sin embargo, las palabras del gobernador no logran calmar los ánimos, y menos desarrollar una comprensión a lo menos lógica de su funcionamiento hasta el día de hoy. Incluso ya se comienzan a escuchar voces que plantean revisar la continuidad de la corporación si no logra revertir los magros resultados en el corto plazo.
La discusión sobre el destino de la Cormag seguirá en el Consejo Regional, donde algunos cores proponen flexibilizar las reglas para evitar su colapso, mientras otros piden derechamente su disolución.
En tanto, desde el entorno de Flies reconocen que la situación es políticamente compleja: la Cormag fue una de las apuestas emblemáticas de su gestión, pensada como un instrumento ágil para impulsar desarrollo, innovación y apoyo a organizaciones sociales. Pero hoy, su baja ejecución y ausencia de resultados concretos amenazan con transformarse en otro flanco de desgaste para el gobernador regional.
Redacción ZonaZero.cl
