1 mes. Más de 60 mil lectores únicos.
Este es el saldo de los últimos 30 días desde que Zona Zero salió al aire de internet.
Han sido semanas largas y también emocionantes.
En Magallanes hacía falta una voz nueva. Una mirada atenta y comprometida con la información.
Lo sostuvimos antes de estrenar y lo sostenemos ahora con el proyecto en marcha.
Este medio pretende buscar distinto. Leer diferente. Expresar con calidad y con variedad.
Conquistar al lector a través de los temas, los enfoques y la audacia en su exposición.
Queremos dar vuelta la vieja fórmula. Vamos primero por el interés de la gente, detrás de su confianza.
Después llegará el resto.
En un mes Zona Zero se ha convertido en el espacio en el que confluyen la información con los más diversos puntos de vista.
Por esto, así como no paran de llegar nuevos lectores, seguimos sumando columnistas de todos los ámbitos y generaciones.
En una época en que el vecino descree y con razón, de casi todo, impusimos un periodismo de datos y reflexión permanente.
En apenas 30 días entregamos al menos 20 temas regionales fuertes, importantes y atractivos.
Además sumamos tres temas que repercutieron internacionalmente.
Revelamos hechos que impactaron a la sociedad de Magallanes y tuvieron eco en otros medios consagrados por el tiempo.
Hicimos nuestro trabajo.
Lo seguiremos haciendo.
En Zona Zero no damos cátedra solemne. Nuestro horizonte es lo contrario, que sean los demás los que opinen y digan lo suyo.
Los medios tradicionales se han olvidado de sus lectores y como le sucede a la política tradicional con sus votantes, también estos están abandonando el barco tradicional, la sombra patriarcal. El periodismo de gesto serio aunque escasamente comprometido.
Esto apenas comienza.
Estamos trabajando en estas horas en nuevas producciones audiovisuales que comenzarán a pedir protagonismo en el sitio web.
Videos, podcasts, documentales, videos musicales y producciones mixtas de alto vuelo llegarán para quedarse.
Otros profesionales comienzan a llegar a la mesa de Zona Zero
Están sedientos de dejar su huella y no seremos nosotros quienes pongan obstáculos en su camino. Al contrario.
Vamos por más.
Nuevo Chile. Nueva sociedad. Nuevos sueños.
Con esa ilusión en la mirada los esperamos.
