Con un intenso debate y con incertidumbre hasta últmo minuto, finalmente se rechazó la indicación salmonera del proyecto de ley que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP) y que según han denunciado los trabajadores de la industria, podría significar la pérdida de unos 70 mil empleos directos.
Así las cosas, seguirá la tramitación de la Ley que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP) y el Sistema Nacional de Áreas Protegidas, ya que el proyecto fue despachado a sala pero con las derrotas de las indicaciones puestas por el Ejecutivo. Los parlamentarios de la Comisión Mixta del Senado votaron el artículo más controversial, el 158, que buscaba prohibir el futuro otorgamiento de nuevas concesiones en áreas protegidas del país. Tras producirse un empate en la votación -5 votos a favor y 5 en contra- el artículo quedó rechazado.
Previo a esta instancia, el proyecto había sido aprobado en la sala del Senado con 33 votos a fines de abril, quedando por revisar una serie de artículos, entre ellos, el artículo 158, el cual buscaba prohibir el futuro otorgamiento de nuevas concesiones en áreas protegidas del país, eliminando así la excepción del actual artículo de la Ley de Pesca.
En la discusión de la Comisión Mixta, el diputado RN, Mauro González, criticó que se tomen decisiones sin escuchar al territorio local. «Los trabajadores y trabajadoras merecen certezas, ser escuchados y respetados. Se juega con la sensibilidad, con la inteligencia de las personas. Ellos saben lo que es su actividad. Aquí nadie está defendiendo a las empresas y las hemos regulado. Hace poco sacamos el proyecto que regula los escapes de salmones, también en un comisión mixta, conversando, regulando, pero escuchando a los trabajadores».
La CPC a nivel local, incluso había ido más allá en sus críticas, señalando que «estamos viviendo la crisis del Conservacionismo Extremo. El bienestar económico y social de los habitantes de la Región, a través del crecimiento es el objetivo de CPC Magallanes. Nuestra región está repleta de oportunidades, y ya se ha convertido en una crisis regional que está afectando nuestro bienestar y nuestro futuro, las ideas y regulaciones de personas ajenas a este bienestar que defendemos y que desde la distancia tratan de imponernos un conservacionismo a ultranza donde prima la conservación del medio ambiente, sobre todo, incluyendo la propia actividad del ser humano para alcanzar su bienestar en equilibrio con la naturaleza».
