El economista José de Gregorio, expresidente del Banco Central (BC), apuntó a la necesidad de comenzar a disminuir el uso de efectivo en el país, sobre todo de los billetes de alta denominación, como una medida -aseguró- de ayuda a la seguridad y la trazabilidad de operaciones.
Según la última Encuesta Nacional de Uso y Preferencia de Efectivo, realizada por el BC, en el 2022 se evidenciaron cambios en el uso y preferencia de los medios de pago, con respecto de lo observado en los años de pandemia: El efectivo vuelve a ser preferido en niveles similares a los años anteriores, aunque superado con las preferencias por el uso de tarjetas de débito.
Frente a esta situación, De Gregorio apuesta que los billetes de 10 mil y 20 mil pesos, los de más valor en nuestro sistema, vayan a la baja, dado que «muchas veces se usan con fines tales como realizar transacciones ilegales, evadir impuestos y para actividades que no se deberían fomentar«.
«No puede ser que en tiendas de lujo tengan contadores de billetes. Es inaceptable que una persona compre un auto o un pasaje de avión en efectivo. Es inconveniente y no tiene sentido. Si alguien llega con un fajo de billetes a realizar una transacción tengo que pensar que algo raro está pasando«, analizó el decano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile.
En entrevista publicada este lunes en La Segunda, el experto advirtió también que se necesitan medidas más radicales, entre ellas que «no se puedan hacer operaciones de más de 500 mil pesos en efectivo«.
«Una persona que hace transacciones de efectivo en una feria claro que puede hacerlas, pero existen muchos otros métodos: cajas vecinas, tarjetas y pago rut, que son mucho más seguros y la tecnología permite de todo», puntualizó.
Para el economista, este avance hacia la digitalización permitirá también «una formalización de la economía muy importante» y ayudar en temas de seguridad, dado que «sabemos que acarrear menos plata es mejor«.
«No es la panacea, pero ayudaría mucho en dos segmentos: la delincuencia y la trazabilidad de operaciones«, cerró De Gregorio al medio antes citado.