La pobreza en la población urbana de Argentina se situó en el 41,7% en el segundo semestre del año pasado, 1,6 puntos porcentuales por encima de la tasa registrada en la primera mitad de 2023, informaron este miércoles fuentes oficiales.
Según indicó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) en un informe, el índice de indigencia se situó en el segundo semestre del año pasado en el 11,9% de las personas, 2,6 puntos por encima de la tasa registrada en el primer semestre de 2023.
En la comparación interanual, el índice de pobreza aumentó en el segundo semestre del año pasado 2,5 puntos porcentuales, mientras que la tasa de indigencia saltó 3,8 puntos.
La población más afectada por la pobreza es la de los niños de hasta 14 años, grupo en el que la tasa de pobreza escala al 58,4% y la tasa de indigencia es del 18,9%.
La medición tiene en cuenta el nivel de vida en los 31 centros urbanos más poblados del país, lo que abarca a 29,5 millones de personas, sobre una población total en Argentina de unas 46 millones de personas.
Según el informe, las ciudades con mayor índice de pobreza son Resistencia (65,2%), en la provincia de Chaco (centro-norte), y Concordia (56,2%), en la provincia de Entre Ríos (noreste).
El aumento de la pobreza en Argentina durante el segundo semestre del año pasado coincidió con una fuerte aceleración de la inflación, que en 2023 acumuló un alza del 211,4%, la tasa más alta del mundo, con un fuerte impacto en el costo de la canasta básica de alimentos y servicios, cuyo valor marca la línea de la pobreza.
Argentina registró su tasa máxima de pobreza en octubre de 2002, cuando el índice trepó al 57,5% tras el estallido de una de las más severas crisis económicas que recuerde el país.
El gobierno de Javier Milei dispuso este miércoles los nuevos cuadros tarifarios para el consumo de gas, que se aplicará desde abril próximo y en tres tramos, para concretar su plan de reducir los subsidios estatales a la energía «sincerando» las tarifas de servicios públicos.
A través de una resolución de la secretaría de Energía publicada en el Boletín Oficial, la primera subida de tarifas en uso de gas será en abril, la segunda entre mayo y septiembre -período invernal- y la tercera en primavera, entre octubre y diciembre.
El esquema tarifario dividirá a los usuarios residenciales en tres niveles, de acuerdo a ingresos altos, medios y bajos, ya que los dos últimos pagarán un aumento atenuado porque seguirán percibiendo subsidios.
Los mayores aumentos porcentuales se darán para hogares de ingresos altos y para usuarios no residenciales, de al menos un 300%, según los primeros cálculos.
Para seguir trasladando los precios a los cuadros tarifarios del servicio público de distribución de gas natural por redes, la norma prevé que reflejen mensualmente la variación del tipo de cambio sobre los precios del gas a ser trasladado a tarifa.