El Banco Central de Chile emitió el Informe de Política Financiera del primer semestre de 2024, documento que analiza los principales riesgos, vulnerabilidades y mitigadores para la estabilidad financiera del país.
En ese contexto, la entidad confirmó que la economía chilena ha logrado resolver los desequilibrios macroeconómicos de años previos y está recuperándose, aunque aún hay sectores rezagados. Esto, ya que el escenario externo continúa siendo la principal fuente de riesgos.
La inflación, que se elevó a máximos en treinta años en 2022, ha ido convergiendo a la meta de 3% y se ajustó el gasto interno, como parte de la resolución del desbalance. Esa reducción ha contribuido a normalizar el endeudamiento y la carga financiera de hogares y empresas.
Por ello, la reducción de la inflación ha causado que el organismo rector reduzca la tasa de interés referencial desde un máximo técnico de 11,25% al actual 6,5%, en medio de un escenario de desaceleración de la economía tras su rápida recuperación postpandemia.
Por otro lado, sobre los riesgos desde el exterior, el Banco Central dijo que la situación macrofinanciera externaaumenta la importancia de seguir incrementando la resiliencia de los agentes locales y del sistema financiero.
Finalmente, la entidad financiera sostuvo que la banca local se mantiene resiliente y que el sistema permanece con niveles adecuados de liquidez, provisiones y capital para mantenerse solvente frente a escenarios de tensión severos.