Cuando me informe que un candidato a la presidencia de la república en su programa había incorporado propuestas, como la referida a regular el funcionamiento de los medios de comunicación, así como también de intervenir respecto a la propiedad de éstos , línea editorial y otras materias en ese sentido y que con el correr de los días el mismo candidato explicando su propuesta ha hondado con profusión en estas materias en una multiplicidad de medios de comunicación escritos , radiales y televisivos . Todo ello , me llevó a reflexionar con algo de preocupación y molestia al mismo tiempo , respecto a lo que entiendo de medios de comunicación y por sobre todo de libertad de expresión, en un mundo democrático.
Lo primero, sólo existe la libertad de expresión donde se vive en democracia , es impensable plantearse libremente si no existieran los espacios de expresión crítica disponibles y que siempre superan la línea oficial .
Lo segundo , sólo con democracia la libertad de expresión da pasos para la existencia de diversos puntos de vista o distintas verdades. Es tan importante esta libertad que incluso se le incorporó como un elemento de primer orden respecto al progreso de las sociedades libres . Solo hay progreso donde la libertad se conjuga con la expresión de la gente.
No estoy diciendo que todos piensen igual , sino que es imperativo que exista prensa libre y plural. El desarrollo de las naciones va unido a la libertad de expresión , es más la democracia no se entiende sin la pluralidad existencial y en ese sentido , esta marca una distancia sideral respecto de las sociedades autoritarias, dictatoriales y totalitarias , donde la libertad de prensa no existe y menos la de expresarse y los medios son escasos , sin repercusión y menos trascendencia , sólo por la supervivencia pueden aspirar a ser voceros del Gobierno que les permite y financia en su existencia.
Cuando no existe la libertad de expresión o se la limita por el terror , es porque una mayoría dominante impone un discurso, que por lo general le cuelgan unos fundamentos éticos universalmente irrisorios e inaceptables.
La libertad de expresión es un derecho , que como tal tiene límites , pero estos lo determina la ley y serán los tribunales los que actuen libremente , según corresponda .
La libertad de expresion siempre es peligrosa , preguntenle a Pinochet que persiguio a medios y periodistas, llegando al asesinato de los que se salian de la linea oficial, a Franco que durante 40 años solo permitio la publicación de partes de guerra o Kim Jong-Un en Korea del Norte, donde incluso las desgracias las lloran y aplauden de pie y mas recientemente Ortega en Nicaragua, donde encarcelo a todos quienes se oponen al divino punto de vista de la pareja presidencial (su esposa es la vicepresidenta).
Por último sólo en democracia existe el derecho a la diferencia, pero donde nunca se debe permitir la diferencia de derechos. No hay derechos distintos. Nunca se debería permitir la existencia de ciudadanos diferentes según su origen en toda la dimensión humana.
A los críticos que generen estas palabras les digo lo mismo que dijo en su momento Raoul Vaneigem , escritor y pensador belga , uno de los actores de París del 68 » Todo el mundo tiene derecho a criticar , incluso a ridiculizar a todas las ideologías, todos los sistemas conceptuales, todos los pensamientos . Tenemos derecho a parir a todos, incluidos los jefes de Estado, los reyes , los caudillos de todo tipo, los que se creen profetas, dioses o gurús».