La instalación de dos plantas de procesamiento de residuos generados por la industria del salmón, para la obtención de harina, aceite y proteína líquida, podría transformar a la Comuna de Punta Arenas, con Cabo Negro como epicentro, en una “Zona de Sacrificio”.
¿Qué es una “Zona de Sacrificio”? El término se refiere a lugares que concentran una gran cantidad de industrias contaminantes, afectando siempre a las comunidades adyacentes. En este caso, la capital de Magallanes.
El abogado Alejandro Ríos Menéndez explica que estas plantas, que instalaría la Sociedad Pesquera Landes S.A., procesarían “un volumen superior a 200 toneladas al día de residuos del salmón. Son los restos que quedan de la etapa de cultivo: las cabezas, las vísceras, las escamas, las espinas. Todo eso en un estado más avanzado de descomposición”.
El procesamiento de los restos de salmón implicaría necesariamente procesos químicos y físicos, lo que generaría residuos, olores y Residuos Industriales Líquidos (Riles), los cuales serían descargados al estuario del estrecho.
Esto sería una seria amenaza para la Reserva Natural Los Pingüinos, ubicada en Isla Magdalena, a pocos kilómetros del lugar donde se emplazarían las plantas. También afectaría a la fauna que habita Isla Marta e Isla Isabel.
Una serie de organizaciones de la sociedad civil solicitaron la apertura de un Proceso de Participación Ciudadana, ya que realizaron una serie de observaciones: “Se desconocen como esta actividad afectaría al entorno, (en relación a las) emisiones que liberarán al ambiente (…), ya que se menciona la descarga de Riles y olores desde las plantas”.
Preocupa también que los olores lleguen al aeropuerto Carlos Ibáñez del Campo, “la trazabilidad de la materia prima (consistente en residuos de la industria del salmón) provenientes desde los centros de cultivo y producción, ubicados en la VII y X región, en términos de su seguridad ambiental y sanitaria en el trayecto de miles de kilómetros hasta las plantas”, como también los residuos sólidos que se generarían a causa del proyecto, ya que el vertedero municipal de Punta Arenas no cuenta con las capacidades ambientales, sanitarias y de seguridad para la disposición final de dichos residuos, precisamente atendido que se declaró que en suma se procesarían 3.750 toneladas al mes de subproductos de la planta de proceso de salmón”.
Todas estas observaciones amenazarían con convertir a una zona de Punta Arenas, en una “Zona de Sacrificio”.
Vea la entrevista completa al abogado Ríos a través de Facebook y Youtube