Por Ricardo Oyarzo.
Este fin de semana vamos a vivir la elección más importante de estos últimos años.
No solo elegimos autoridades de paso, como habitualmente ocurre, sino que además en este acto electoral le vamos a entregar a un grupo de personas la importante responsabilidad de debatir, acordar y redactar, el texto de la Constitución que eventualmente, de aprobarse, va a regir por los próximos años en nuestro país.
Por tanto, no es una elección cualquiera, y en ese contexto es importante saber cuáles son las principales reglas que van a utilizarse según ley, para elegir a los constituyentes que tendrán la tarea de representar a la Región de Magallanes, en la Convención Constitucional.
Para ello, lo primero que debemos decir, es que el sistema electoral va a ser el mismo que se utiliza para elegir a los parlamentarios, en consecuencia, el método matemático utilizado es el llamado Método D’Hondt.
Este es un método que según la ley se utiliza en Chile, para determinar el número de cargos electos, en base a la proporción de votos obtenidos, considerando a la lista donde van los candidatos.
En el caso de Magallanes, en la actual elección a constituyentes tenemos 8 listas, para elegir 3 cargos que van a representar a la región.
Dentro de estas 8 listas en la Región de Magallanes, algunas listas decidieron llevar 6 candidatos(as), otras llevan 5 candidatos(as), otras listas llevan 3 candidatos(as), otras listas llevan 2, e incluso hay una lista que lleva un solo candidato.
En este punto debemos decir, que las listas que sacan más votos, sumados todos sus candidatos(as), según el sistema de elecciones que tenemos, tienen más posibilidades de ganar con un constituyente. Eso también supone, que las listas que llevan 3, 2 o 1 candidato(a), tienen menos posibilidad de ganar, no porque sean malos candidatos(as), sino porque tienen menos personas en su lista, y es más difícil que una o dos personas le ganen a 5 o 6 que están en otra lista, y que suman sus votos.
Esta información de la cantidad de personas que tiene la lista de tu candidato(a), es importante considerarlo antes de elegir por quién votar, porque es un factor que determina si tu candidato(a) tiene más o menos posibilidades.
Además, como los candidatos(as) dentro de una lista suman sus votos, también puede pasar que tu candidato(a) sea un buen candidato, y quizás independiente, pero va dentro de una lista de partidos políticos y, por tanto, los votos de tu candidato(a) van a ayudar a sumar a la lista de ese partido. En consecuencia, también es importante saber en qué lista esta tu candidato(a) y a qué partido representa esa lista.
Así las cosas, el domingo en la noche cuando termine la elección, se van a contar los votos, y se van a ordenar las listas desde la lista que tiene más votos a la que tiene menos votos. Luego de eso, se aplica el método matemático de D’Hondt para determinar que lista elige candidato(a), en proporción a los votos que saco la lista, y el número de cupos que tiene la región (en el caso de magallanes 3).
Así, luego de ordenar en base a estos cálculos, se eligen a los candidatos(as) más votados dentro de las listas más votadas. Lo puede generar, por ejemplo, que, si una lista tiene solo dos candidatos(a), aunque uno(a) de esos dos candidatos(a), saque muchos votos, si no les gana a todos los candidatos(as) de la otra lista sumados, queda fuera.
Al final, luego de que se sabe en base a estos cálculos, que listas meten candidatos(as) electos, se aplica la regla de paridad, que a grandes rasgos y a modo de ejemplo, supone que, si hay tres hombres electos, uno tiene que bajarse porque debe ingresar una mujer, o al revés, si hay tres mujeres electas, debe bajarse una para que ingrese un hombre, para así cumplir con la paridad, que busca equivalencia en la cantidad de hombres y mujeres que lleguen a la constituyente.
En mi opinión, si no quieres que salgan electos los mismos de siempre, y si tu opción es buscar elegir constituyentes ciudadanos e independientes, entonces debes preocuparte de elegir una lista que sea completa de candidatos independientes, y que tenga el número suficiente de personas dentro de la lista para ser competitiva. Para así, darle la vuelta al sistema y que no gane la letra chica.