Después de seis meses, los pagos del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) Universal están llegando a su fin durante los primeros días de diciembre. Frente a este escenario es que desde la oposición se pidió al gobierno extender la medida económica hasta marzo.
El Gobierno tomó la decisión de cerrar las puertas a la extensión del IFE Universal hasta marzo, apelando a focalizar el gasto en subsidios laborales.
En la oposición pidieron abrirse a una alternativa con una cobertura más acotada, mientras que en el oficialismo señalaron que los recursos deben quedar en reserva, para enfrentar contingencias sanitarias.
Después de seis meses, los pagos del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) Universal están llegando a su fin durante los primeros días de diciembre.
Tras el cuarto retiro de ahorros previsionales, una parte de la oposición reflotó la idea de extender el aporte hasta marzo.
En el Gobierno cierran la puerta a esta alternativa y dicen que el gasto tiene que focalizarse en subsidios al empleo, como el IFE Laboral.
Un mes de IFE tiene un costo aproximado de 3 mil millones de dólares, por lo cual el diputado socialista Jaime Naranjo reconoce que la decisión es compleja, pero se puede buscar alternativas más acotadas.
En la oposición comparten estas aprehensiones, y el jefe de bancada del PPD, Raúl Soto apuntó a “hacer un último esfuerzo”, mientras el diputado Marcelo Díaz cree que no hay que crear falsas expectativas.
“Estamos en un proceso de reactivación. Necesitamos el último empujón del Estado para las familias chilenas, para pagar deudas y emprender”, aseveró.
En el oficialismo respaldan al Ejecutivo en relación a la estrechez de las cuentas fiscales, y el senador de la UDI, Juan Antonio Coloma recalcó que el diseño original del IFE apunta a enfrentar emergencias.
“Cualquier uso del IFE Universal deja sin recursos al próximo Gobierno. Hay que ser cuidadoso, estas son reservas de último minuto”, indicó.
Según datos del Ejecutivo, el IFE Laboral completó más de 500 mil pagos hasta octubre, y un 62,5% de los beneficiarios fueron mujeres, personas jóvenes, adultos mayores o personas con discapacidad.
