Los candidatos presidenciales y su visión optimista para el futuro de la salmonicultura chilena (Por Claudio Andrade)
Los candidatos presidenciales tuvieron su momento para expresarse respecto de la industria del salmón chilena en el marzo del “Salmón Summit 2025”. Un punto nada menor dentro de la agenda económica y social del país.
A esta altura quedó claro que el presidente Gabriel Boric nunca pretendió ser un aliado estratégico de un sector que representa unos 86.000 empleos directos e indirectos y alrededor de USD 6500 millones en exportaciones. Los motivos para esta posición parecen enteramente ideológicos y poco vinculados al desarrollo nacional.
En rigor, el presidente de SalmónChile, Arturo Clément, advirtió en el cierre del evento que no acudió ninguno de los funcionarios invitados por la organización. “Hace más de un mes y medio invitamos a varios ministros, subsecretarios, sin embargo, nuevamente, nadie llegó. Así es difícil dialogar y avanzar”, explicó. Toda una señal por parte de la administración Boric.
Poco después de su arribo al poder, el mandatario advirtió que la salmonicultura debería abandonar las áreas de reserva, generando preocupación en toda la industria. La declaración probablemente sorprendió a los propios empresarios por las consecuencias que tendría una decisión de tal naturaleza. En la parte final de su mandato Boric no pudo avanzar en este propósito, pero en los últimos 3 años la industria ha soportado ataques de diverso orden por parte de funcionarios del gobierno y de ONGs extranjeras que no ocultan que tienen sus planes bien específicos para el sur de Chile. Y estos planes no incluyen su desarrollo sino más bien su despoblamiento.
El escenario del debate fue el Teatro del Lago en Frutillar al que acudieron unas 1500 personas. Allí estuvieron presentes Jeannette Jara, José Antonio Kast y Evelyn Matthei para entregar su visión, entre otras cosas, de la industria del salmón.
A esta altura parece extraño que un país que viene rompiendo récords de exportación –y todo indica que el 2025 podría volver a mostrar cifras importantes puesto que durante la primera parte del año se exportó por más de USD 52.000 millones– gracias al cobre, la salmonicultura y la fruta, especialmente, todavía mantenga un frente de rechazo hacia la acuicultura de salmones, espacio donde Chile es líder mundial junto con Noruega. En 2024 Noruega exportó por más de USD10.000 millones y, según ha trascendido, planifica incrementar fuertemente su producción en los próximos años.



Sin embargo, los candidatos ofrecieron señales alentadoras.
“La industria salmonera es el cobre de las regiones australes”, indicó Evelyn Matthei. La candidata planteó la posibilidad de triplicar la producción mediante un plan publico-privado inspirado justamente en Noruega. También se comprometió a declarar el 26 de mayo como el “Día del Trabajador Salmonero”, un pedido que meses atrás la Multisindical de los Trabajadores le había solicitado al ministro de economía Nicolás Grau.
Matthei aprovechó para pasar factura a Jara. “El actual gobierno trató de destruir la industria del salmón (…) Yo no escuché a la ministra del Trabajo protestando por la destrucción de sus empleos. Por eso, vamos a declarar el 26 de mayo el Día del Trabajador Salmonero”, aportó.
La exalcaldesa pidió modificar la polémica ley Lafkenche. “Para cultivar salmones se ocupan solo 4.120 hectáreas de mar, con la ley Lafkenche se están pidiendo 3 millones 900 mil hectáreas, es decir, los salmones ocupan el uno por mil de lo que se está pidiendo, y mientras tanto, todo parado. Ahí hay un abuso flagrante que no se puede seguir permitiendo, hay que modificar la ley Lafkenche”, subrayó.
“Esta es una industria netamente regional. Probablemente la más regional de todas las industrias. No depende del Estado. No ha tenido nunca ningún subsidio. Quiere trabajar y, por lo tanto, el Estado no puede seguir siendo un obstáculo”, concluyó.
“Chile necesita volver a ser competitivo en la industria del salmón”, señaló por su parte José Antonio Kast. El candidato apuntó contra la burocracia y adelantó que impulsará una “desregulación sustantiva, reducción de impuestos y menor gasto político”, sintetizó SalmónChile en sus redes.
“Chile necesita volver a ser competitivo. Nunca más aceptar el chantaje y las regulaciones excesivas para una empresa que ha demostrado ser eficiente”, siguió Kast.
Jeannette Jara se distanció de ciertos sectores del gobierno de Boric y de las visiones ofrecidas por las ONGs más radicales y mencionó “un nuevo pacto para la salmonicultura”.
“Chile tiene un gran potencial de construir, fortalecer su economía azul, dada la enorme costa que tenemos. Y sin duda, la industria del salmón como segunda industria exportadora de nuestro país todavía tiene mucho espacio para crecer”, señaló.
“La candidata propuso descentralizar la toma de decisiones, simplificar permisos sin bajar estándares ambientales y fomentar la innovación real. Reafirmó su enfoque en el diálogo social como eje de gobernanza, buscando que el crecimiento llegue a todos los sectores, desde grandes empresas hasta las pymes y las familias chilenas”, consignó SalmónChile en referencia a Jara.
En la apertura de las jornadas del Salmón Summit, Arturo Clément, presidente de SalmonChile, ya había resaltado el papel clave que juega el sector en la economía nacional. “Como sector productivo, nuestra principal preocupación es el estancamiento económico del país y cómo la salmonicultura puede ser parte clave de la solución”, señaló Clément.
“Necesitamos un marco normativo claro y estable que incentive la innovación y el desarrollo local. Finalmente, buscamos que los candidatos conozcan el carácter estratégico de la salmonicultura, no solo para el sur y su aporte a Chile, sino también como pilar de la seguridad alimentaria global”, agregó.
Fotografía central: Municipalidad de Frutillar. Fotografías internas: SalmónChile.
