La ministra de la Secretaría General de la Presidencia (Segpres), Ana Lya Uriarte, afirmó este jueves que la delincuencia «es el primer tema de preocupación en orden de gravedad» para el Gobierno y anunció que le pondrán «máxima urgencia» a la agenda de seguridad en el Congreso Nacional.
En entrevista con El Diario de Cooperativa, la secretaria de Estado -nexo entre el Ejecutivo y el Parlamento- dijo que «el enemigo común, sin distinciones políticas ni de ningún tipo, es la delincuencia, el crimen organizado, el narcotráfico, la asociación ilícita, que constituyen hoy verdaderas empresas ultra súper eficientes y súper coludidas además».
«Como efectivamente estamos convencidos de que no inventamos la rueda el día de hoy, muchas iniciativas que vienen del Gobierno anterior y incluso de antes las estamos tomando y les estamos ingresando indicaciones para que retomen su camino y prontamente vean la luz», señaló Uriarte.
«Van a tener la máxima urgencia», subrayó.
En esa línea, sostuvo que ayer «estuvimos con la ministra (del Interior, Carolina) Tohá reunidas con los diputados y los senadores de las comisiones de Seguridad y hay un amplio consenso respecto de avanzar en nuestras iniciativas y en las iniciativas que tienen los parlamentarios. Hay iniciativas que vamos a recoger que son extraordinariamente positivas».
Una de esas iniciativas, puntualizó, es aquella que modifica el Código Penal para tipificar el delito de sicariato, «que es una fórmula que lamentablemente ha ingresado a nuestro país y que no era frecuente en nuestro mundo».
Asimismo, relevó el paquete de medidas que busca frenar la violencia en la Macrozona Sur: «En la Segpres estamos trabajando con el Ministerio del Interior, nuestros equipos jurídicos, e incluso con el Ministerio de Defensa en todas las iniciativas que tengan algún tipo de injerencia en acciones de las Fuerzas Armadas para poder avanzar. Es el caso del proyecto de infraestructura crítica, que contempla la intervención de militares, y naturalmente el estudio que estamos haciendo para modificar el actual estado de excepción, no en términos de eliminarlo, sino que de complementarlo».