La ex autoridad no cree las cifras entregadas por la administración Piñera y se preocupa por la lentitud de gestión de la cartera en Magallanes, toda vez que el centralismo en esta materia nos juega en contra.
Con profunda preocupación respecto de la continuidad de políticas de Estado, particularmente en Vivienda en Magallanes, conversó el ex seremi de Vivienda Fernando Haro con BDR.
La ex autoridad explicó que en el sector se gestó un retraso durante la administración Piñera, lo cual perjudica a la comunidad magallánica, toda vez que el convenio que se anunció en los últimos días “con bombos y platillos” se conocía desde el 2014 que terminaba el 2020.
“Si bien es cierto se saluda un convenio como este, porque permitió hacer mucho, llega con un año de atraso y también como te digo el papel aguanta todo”, explica.
Además, Haro es escéptico sobre la información entregada por la actual administración: “La verdad es que no tengo porque creer en las cifras de este Gobierno, porque han mentido sistemáticamente con las cifras, al menos en vivienda (…) entonces es una constante que vemos que se mienta con las cifras, del COVID, etcétera, en este caso las cifras de Vivienda”.
El ex seremi aprovechó la ocasión para resaltar los avances en la cartera que se experimentaron durante el 2° Gobierno de Bachelet, destacando las mejoras que dejaron atrás, según manifestó, de la vivienda básica como una vivienda precaria.
“El tema de la calefacción central para la vivienda básica es un avance importantísimo, obviamente no es un lujo en la región” argumentó.
Para Haro, además, el centralismo ha jugado permanentemente en contra de los intereses de Magallanes, toda vez que las autoridades de la capital no conocen en profundidad las necesidades y expectativas regionales, especialmente las magallánicas.
“Creo que la única explicación a este letargo es esta consulta, esta dependencia centralista excesiva de preguntar todo al norte y no tomar las riendas de la región”, apuntó
Respecto del Plano Regulador de Punta Arenas, Haro manifestó que es un atraso lo que sucede actualmente. Pero que es subsanable con actualizaciones, pero que eso depende de que las autoridades hagan las tareas respectivas.
“El Plano Regulador costó ocho años, pero había que tenerlo. En la actualización, si la Contraloría te hace una observación de que hay terrenos inundables, y hemos tenido malas experiencias en Punta Arenas específicamente. Recordemos la situación del “Pueblo Hundido” entonces me parece atendible la observación de Contraloría en ese sentido. Pero las mitigaciones hay que hacerlas y no esperar cuatro años (…) no es necesario hacer un plano nuevo, hay vías que son más cortas, como los excepcionales”.