El Banco Mundial volvió a revisar a la baja sus perspectivas de crecimiento para América Latina y el Caribe para 2023, hasta el 1,3%, según su informe de perspectivas globales publicado este martes donde asegura que, en la región, sólo Chile y Haití sufrirán recesión.
La institución ya había avisado, en un informe publicado en octubre, que la previsible bajada de precios de las materias primas a partir de este año ralentizará el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de las economías latinoamericanas, muy dependientes de sus exportaciones.
En el texto de este martes, el Banco Mundial advierte que la inflación podría ser más persistente en la región de lo previsto inicialmente, lo que podría llevar a un aumento continuado de los tipos de interés por parte de los bancos centrales, restringiendo aún más el crecimiento a corto plazo. Esta situación, advierte el organismo, puede obstaculizar el desarrollo inclusivo de la región.
Para nuestro país, el organismo no tiene buenas noticias y las chilenas y chilenos deberán seguir sufriendo con el alza del costo de la vida y una inflación que sigue subiendo sin detenerse.
De hecho, se espera una contracción: El organismo proyecta una pérdida del 0,9% del PIB por la erosión del consumo que provoca la baja de ingresos reales y el alza de los productos.
En ese sentido, la luz al final del túnel recién se empezará a ver en el año 2024, cuando la economía chilena crezca un 2,3%, lo que podría hacer bajar la inflación y los precios de la canasta básica.