Lejos de terminar está el conflicto diplomático que enfrenta a los Gobiernos de Chile y Argentina, por la delimitación de la plataforma continental de 200 millas marinas, en el cual el país trasandino interpreta como de su patrimonio una medialuna que se superpone en 5.302 km2 con la plataforma jurídica chilena.
Al respecto, el Presidente Piñera declaró en entrevista a El Mercurio de este domingo que «Chile lo que está haciendo es ejercer su derecho y declarar su plataforma continental».
Al respecto, ex cancilleres de oposición salieron a apoyar la postura chilena. Ignacio Walker, ex ministro de RR.EE. de Lagos, comentó a Emol que «siempre hemos sostenido que las pretensiones de Argentina del año 2009 y 2016 son inoponibles a Chile, porque son un acto unilateral, que va más allá del punto F, que es el punto límite que se establece en el Tratado de Paz y Amistad».
A su vez, Mariano Fernández, canciller del primer período de Bachelet, explicó que “tenemos que preocuparnos de nuestros intereses y cualquier discrepancia con Argentina debemos solucionarla a través del diálogo”.
Sin embargo, no solo en Chile la oposición se alinea con el Ejecutivo. A través del medio digital “Ámbito”, Diego Guelar, exembajador argentino en China durante la administración de Mauricio Macri, declaró con firmeza que “es urgente que nos sentemos con las autoridades chilenas y resolvamos juntos la cuestión de nuestra soberanía marítima… no sea cosa que volvamos a enfrentarnos como lo hicimos en el pasado”, aludiendo al Conflicto del Beagle que casi termina en guerra en 1978.
Por su parte, Federico Frigerio, diputado representante de Tierra del Fuego dijo en el mismo medio que «el Gobierno chileno pretende apropiarse de una parte de la plataforma continental argentina y de una extensa área de los fondos marinos y oceánicos», agregando que “los fueguinos esperamos que esto se resuelva de forma urgente, respetando el derecho internacional y preservando la hermandad de ambas naciones”.
La guerra de declaraciones está desatada. Es de esperar que el conflicto no escale y se llegue a buen entendimiento a través del diálogo.