Más que extrañeza provocó un correo enviado por el Centro de Estudios Regionales de la Universidad de Magallanes (Vicerrectoría de Vinculación con el medio) a las autoridades regionales, donde se da a conocer la realización de dos jornadas de Participación Ciudadana orientadas a “revisar el borrador del Plan de Manejo de la Reserva Nacional Kawéskar”, pero al mismo tiempo se solicita que “los servicios públicos no asistan a los talleres presenciales” con el fin de “no exponer a las autoridades durante el proceso deliberativo”.

A su vez, en el correo se les pide a las autoridades por parte de la casa de estudios que apoyen en la difusión de la convocatoria entre las comunidades regionales. Es decir, que inviten, promuevan, promocionen, pero que no asistan.

La entidad por medio de un correo institucional entrega las instrucciones a los representantes del Ejecutivo local para que difundan la actividad a través de canales oficiales como sitios web, redes sociales, boletines, etc, y que faciliten el contacto con “organizaciones sociales, juntas de vecinos y líderes comunitarios de su territorio”.

También se insta a las autoridades a apoyar lo anterior para lograr “una participación amplia y representativa”.

Llama la atención el tenor del mensaje oficial, y el mandato que se les entrega a las autoridades vía correo electrónico para que no asistan a la actividad, justificando dicha solicitud señalando que es para “no exponer a la autoridad”. La primera pregunta que se debe hacer es ¿exponerlos a qué? Luego debemos preguntarnos ¿Cuál sería la facultad de un ente universitario de solicitar la no presencia de los representantes del Ejecutivo a una actividad tan relevante como la revisión del borrador del Plan de Manejo de la Reserva Nacional Kawéskar?

Y por último, cabe consultar ¿Por qué la Universidad de Magallanes podría mandatar a los servicios públicos respecto de este o cualquier tema?

Será difícil lograr una “participación amplia y representativa”, tal cual dice el correo, si con antelación se está restringiendo la asistencia de los representantes de los servicios públicos que representan al Gobierno, con tal de “no exponerlos”.

Parte del correo a continuación: